La conciencia ambiental y la protección del medio ambiente son temas que preocupan y que ocupan a los gobiernos de todo el mundo. Los acuerdos que se han logrado para frenar la contaminación y el uso excesivo de los recursos naturales no renovables han puesto en alerta a todas las industrias responsables, y el turismo no ha sido la excepción.
Es de vital importancia recordar que alrededor de los monumentos naturales más importantes del mundo viven personas que necesitan ser incluidas en el crecimiento de una determinada región o ciudad. Los habitantes merecen mejores condiciones de vida y que el turismo de la provincia o su país los apoye, para así poder crecer y desarrollarse en su propio territorio.
Hay maravillas naturales que no son conocidas por sus pobladores originarios, bien sea porque se cobra mucho dinero para acceder a ellas, o porque se sienten excluidos en su propio lugar de origen, Las Cataratas del Iguazú que comparten Brasil, Paraguay y Argentina es una de ellas.
¿Cómo apoya el turismo sostenible a las comunidades?
El turismo verde o ‘sostenible’ puede ayudar a que los pobladores que se encuentran cerca de los parques nacionales o de áreas declaradas como monumentos naturales, puedan desarrollarse y trabajar en conjunto con hoteles, tiendas, restaurantes y otros establecimientos de atención al turista. Aquí se comparten algunas ideas.
- G
uías locales: el turismo sostenible aprovecha el conocimiento y arraigo de las personas que han nacido en un entorno natural y turístico. Estos guías poseen habilidades especiales, idioma y vivencias que enriquecen una visita guiada o un recorrido a pie por bellas montañas. Tomar en cuenta a estos habitantes permite que puedan vivir en sus lugares de origen y no tengan que desplazarse a áreas urbanas, perdiendo así su identidad cultural.
- Productos regionales: muchos hoteles que se encuentran en Latinoamérica o Europa ofrecen los productos que produce la región. Estos productos generalmente son orgánicos y certifican que no hacen daño al medio ambiente. Artesanos y campesinos también se suman de forma positiva como proveedores de servicios a los hoteles eco-friendly de su ciudad o región.
- Empleados de la comunidad: no sólo facilita de este modo el sentido de pertenencia, sino también el crecimiento del turismo del país. Al contratar personal de la zona natural o ciudad en donde se encuentra un hotel, restaurante o tienda, se garantiza que ese empleado tenga una mejor calidad de vida, pues vivirá cerca de su lugar de trabajo, y por ello aportará un buen servicio a los huéspedes.
Por supuesto, no hay que olvidar que proteger el medio ambiente y no violentar la flora y fauna del lugar también repercutirá favorablemente en las comunidades que hacen vida en las ciudades y lugares con interés turístico del mundo.